ACTIVIDADES

Enrique V. Iglesias, exsecretario General Iberoamericano

Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales (Badajoz), 16 de marzo de 2018

CONFERENCIA ‘LOS DESAFÍOS DE UN CAMBIO DE ÉPOCA’.

SINOPSIS DE LA CONFERENCIA

La exposición ha tratado sobre los cambios en la coyuntura internacional y sus demandas sobre qué hacer y las políticas nacionales e internacionales y Enrique Valentín Iglesias ha definido el concepto de ‘Pax Americana’ como el periodo que nace después de la Segunda Guerra Mundial y se extiende hasta ahora, bajo la hegemonía geopolítica de los Estados Unidos.

Esto ha permitido, ha dicho, uno de los períodos de mayor brillantez de la humanidad a través de un aumento de la población, de la esperanza de vida y de un desarrollo democrático y social sin parangón a nivel global y ha defendido que actualmente existen fuerzas que están erosionando esta ‘Pax Americana’ con la posibilidad que llegue a su fin y entremos en una nueva época para la humanidad.

Ha resumido estas fuerzas en varios factores como son el surgimiento de una clase media que ve frustradas sus expectativas; el traslado del poder geopolítico de Occidente a Oriente; el declive de Estados Unidos como potencia mundial en favor de China y la crisis de la democracia representativa.

Para afrontar esta nueva época de incertidumbre, ha reivindicado el papel clave de la Educación, la Igualdad y la Política como garantía para el progreso en una sociedad globalizada.

Enrique Valentín Iglesias nació en Asturias y tiene nacionalidad uruguaya. Graduado en Economía y Administración por la Universidad de la República de Uruguay, realizó estudios superiores de especialización en Estados Unidos y Francia.

De 1961 a 1965, Iglesias fue director de la Comisión de Inversiones y Desarrollo (CIDE) que preparó el primer Plan Económico y Social para Uruguay. En 1967 fue elegido primer presidente del Banco Central del Uruguay (1967-1968).

Ha sido profesor de Desarrollo Económico y director del Instituto de Economía de la Universidad de la República de Uruguay y ha escrito numerosos artículos, ensayos y libros sobre economía latinoamericana y uruguaya, mercados de capital, financiación externa y multilateralismo.

De 1972 a 1985, fue secretario ejecutivo de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe de las Naciones Unidas (CEPAL) y secretario general de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Fuentes de Energía Nuevas y Renovables que tuvo lugar en Nairobi (Kenia) en 1981.

Fue designado ministro de Relaciones Exteriores de Uruguay (1985-1988) por el nuevo gobierno democrático que surgió después de varios años de dictadura militar en el país, ejerciendo como presidente de la Reunión Ministerial que diera inicio a la Ronda Uruguay del Acuerdo General sobre Aranceles y Comercio (GATT), en Punta del Este (Uruguay) en 1986, negociaciones que llevaron a la creación de la Organización Mundial del Comercio (OMC), sucesora del GATT.

Entre 1988 y 2005 fue presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el más antiguo y grande entre los bancos regionales de desarrollo. En 2005 fue designado Secretario General Iberoamericano, cargo de nueva creación que desempeñó hasta 2014.

En 2003, el secretario general de las Naciones Unidas, Kofi Annan, le designó como miembro del Grupo de Alto Nivel que publicó el informe “Un mundo más seguro: la responsabilidad que compartimos”, tratando los retos de la paz mundial y la seguridad, así como la reforma de las Naciones Unidas. Iglesias fue también miembro del Grupo de Alto Nivel de Kofi Annan para la Alianza de Civilizaciones.

En la actualidad, dirige la Cátedra de América Latina de la Universidad Pontificia de Comillas-ICADE, preside el Consejo Iberoamericano para la Productividad y la Competitividad y es director de la Revista Pensamiento Iberoamericano.

Enrique Iglesias ha sido investido doctor ‘honoris causa’ por diez universidades de América y Europa, y ha recibido numerosas distinciones y reconocimientos internacionales, entre ellos el Premio Príncipe de Asturias; la Gran Cruz de la Orden de Isabel la Católica o la Legión de Honor de Francia, así como las más altas condecoraciones de los países latinoamericanos.