ACTIVIDADES

CONCIERTO OPERA OMNIA

Iglesia del Monasterio de San Jerónimo de Yuste (Cáceres) | 23 de septiembre de 2023

AMOR. NO TE LLAME AMOR: Canciones en el teatro español del Siglo de Oro

Este primer verso de “El caballero de Olmedo”, una de las más conocidas obras de Lope de Vega, da título a este programa que se centra en la música que acompañaba a las obras de teatro del Siglo de Oro español, canciones solistas con texto generalmente profano cuyo origen se encuentra en las canciones o aires de comedias, óperas y zarzuelas y que se llamaban tonos. Estas canciones, o tonos, se desligaban de las obras originales a que estaban en principio destinadas, y llegaban a formar parte de un repertorio independiente dentro de círculos cortesanos, no sólo españoles, sino también austríacos y franceses, donde esta música tenía gran éxito. Recordemos que Luis XIV de Francia era hijo y esposo de dos mujeres españolas que llevaron a la corte del país vecino parte de las tradiciones de la península. Las características musicales de los tonos son su melodía sencilla, de aire popular, y su gran complejidad rítmica, resaltada por el acompañamiento de la guitarra española.

Mientras que, en el resto de Europa, por influencia italiana, se impone la sucesión de Recitativo y Aria como la forma estándar de la música teatral, en España se conservan las estructuras tradicionales de Estribillo y coplas, si bien no sean raros los experimentos de fusión entre las formas hispanas y las italianas.

Nuestro programa Amor, no te llame amor reúne una serie de tonos, principalmente, de Juan Hidalgo (1614-1685), considerado uno de los mejores compositores de este género y autor de la primera ópera española, Celos aun del aire matan, que escribió junto al dramaturgo Calderón de la Barca con el que solía trabajar desde 1657. El programa incluye un tono del que fuera maestro de la Real Capilla con Felipe V, Sebastián Durón llamado

Abril floreçiente; un tono de Manuel Egüés titulado ¿Quieres estarte quieto, Cupido? perteneciente al «Manojuelo Poético-Musical de Nueva York», recopilación manuscrita de piezas poético-musicales de los siglos XVII y XVIII que se conserva en la biblioteca de The Hispanic Society of America; y el bellísimo tono anónimo No hay que decirle el primor tan célebre en la época que el propio Cervantes lo nombra en El rufián dichoso. El programa lo completan tres piezas instrumentales de reconocidísimos compositores como Antonio Martín y Coll y Diego Ortiz.

Esperamos que con este concierto, los espectadores puedan recrear en su mente lo que podría ser una velada en la corte o una tarde en los corrales de comedias que llenaban la ciudad de Madrid.